Los personajes de estas historias no saben que se les observa. Una niña enseña a su padrea hacerse el dormido para escapar de las situaciones sin salida; una anciana que ve por primera vez la televisión descubre con El Padrino la relación entre el tiempo y los saltamontes; la conversación entre dos hermanos se convierte en una rebelión contra la vida que les dio su padre; Sonia engulle botes de leche condensada como alivio ante un presente que la desborda... Y es entonces cuando llega el instante en que algo de vital importancia va a cambiar para ellos, sin que aún sean conscientes de lo que sucede. Cualquiera de nosotros, de haber sido observado en un momento de frágil intensidad,podría habitar este libro.Con su característico humor y su finísima elegancia, y también con una inagotable ternura, Pedro Zarraluki revela la inesperada capacidad de unas vidas que parecen haber tocado fondo para resurgir con imaginación y recuperar su dignidad.