Convivir plantea una serie de problemas y conflictos –de distinta intensidad- que conviene aprender a prevenir o a resolver. Temas como la comunicación los malentendidos, la autonomía dentro de la pareja, los celos, el modo de resolver los conflictos, las creencias básicas de cada uno de los cónyuges, son de gran importancia para desarrollar una inteligencia de las parejas. Porque que las parejas funcionen bien debe ser un asunto prioritario para todos los que nos dedicamos a la educación, por la influencia que tiene en el óptimo desarrollo de los niños.
La maternidad/paternidad no anula el resto de la vida de los padres. Siguen siendo personas con sus proyectos, sus deseos, sus aficiones, su vida profesional y su vida de pareja, pero que durante un periodo de su vida van a tener que dedicar mucho tiempo al cuidado de sus hijos. Pero queremos que aprendan a hacerlo inteligentemente, haciendo compatible esas tareas con su propio proyecto personal.