¿Que esconde la imagen peculiar de la mujer celta? ¿Sobrevivió algo de ella a lo largo de los siglos? Jean Markale busca respuestas a través de esa figura femenina que parece ocultarse entre mitos y leyendas.
Una “Princesa engullida “, oscura y silenciada a los ojos del progreso interior por un mundo paternalista que fue opacando sus brillos. Heredera, de algún modo, de una antigua mujer-sol cuyos rasgos son aún más visibles en la leyenda de Isolda, quien entregaría su luz amorosa a Tristán; o en la “ Doncella del Grial” portadora de la copa salvífica.
Una mujer que no se resigna y cuya imagen centellea desde la, profundidad de nuestro ser.
Una mujer celta, en suma, que hoy se nos aparece como una fuente de luz transformadora.