Edward Burbrooke y Florence Fairleigh tienen dos cosas en com250;n: el mismo abogado y un inter233;s urgente en encontrar a la persona adecuada para sus respectivos planes. Edward necesita una mujer que se case con su joven hermano Freddy para acabar con el esc225;ndalo que suponen los escarceos homosexuales de 233;ste. Florence busca un marido amable, dulce, y, sobre todo, con la suficiente fortuna como para alejar de ella para siempre el fantasma de la pobreza. Con lo que ninguno de los dos contaba es con la t243;rrida atracci243;n que surgir225; entre ellos, un deseo irrefrenable que puede cambiarlo todo.
ELLA BUSCABA UN MATRIMONIO SIN AMOR
Cuando pone pie en Londres, Florence tiene claro que no viene en busca de amor, sino de un marido que solucione su vida, y est225; dispuesta a emplear la mitad de la exigua herencia que le ha dejado su padre para conseguirlo. El matrimonio de conveniencia que le propone su abogado con el joven Freddy Burbrooke le parece una soluci243;n pr225;ctica, casi ideal. Pero si el amor no entra en sus planes 191;por qu233; no puede evitar estremecerse cada vez que est225; cerca de Edward, el fr237;o y distante hermano mayor de Freddy?
201;L LO CALCUL211; TODO, MENOS SU PROPIA Y ARROLLADORA PASI211;N...
Desde muy joven, Edward se ha visto obligado a cuidar de su querido hermano peque241;o, y se ha convertido en un verdadero padre para 233;l. Eficiente y calculador, le ha buscado incluso una esposa para salvaguardar su honor tras el 250;ltimo esc225;ndalo. Pero Edward no lo tiene todo controlado. Quiz225; si no hubiera visto a su futura cu241;ada aquella tarde, cambi225;ndose ante el espejo, podr237;a sac225;rsela de la cabeza. Pero ahora, cada vez que est225; cerca de ella, todo su planeado esquema parece desmoronarse ante una pasi243;n que no conoce l237;mites.